Maruja y Licenciada

Como casi todos los períodos post-vacacionales, parece que volvemos a estar algo escasos en cuanto a  donaciones de sangre se refiere. Los que hemos estado cerca de personas que han necesitado transfusiones y han recibido de ellas la VIDA, sabemos lo importante que para un enfermo es ese pequeño acto que para el donante supone solamente dar un poquito de sí. A pesar de todos los avances tecnológicos y científicos, no ha llegado aún el momento en el que se pueda fabricar sangre sintética, los únicos fabricantes de sangre seguimos siendo nosotros mismos, los humanos, y somos más humanos cuanto más solidarios nos hacemos y cuanto más pensamos en el otro, a pesar de que nunca lleguemos a conocer a ese otro al que en alguna ocasión hayamos podido salvar la vida. Es muy fácil donar sangre, y casi todos podemos cumplir los requisitos necesarios para ello: estar entre los 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos, no padecer determinadas enfermedades y estar entre algunos otros parámetros

La maruja-licenciada tiene a gala elaborar riquísimos platos para alimentar a su prole y obsequiar a los mejores paladares que suelen estar en posesión de amigos y familiares. En esta ocasión la rceta publicada son una facilísimas y exquisitas patatas guisadas con almejas y un puñadito de arroz.  INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS Medio kilo de almejas Un kilo de patatas  1 Pimiento verde 1/2 Pimiento rojo 2 Dientes de ajo Medio sobre de azafrán en polvo  Un par de cucharadas de aceite Agua o caldo Sal a gusto He de decir que los ingredientes y tiempos los doy son a modo orientativo, ya que considero que en la cocina se van añadiendo y reduciendo los mismos según las necesidades del momento y según veamos como se va consiguiendo la elaboración dependiendo de las materias primas del momento. También pueden oscilar las cantidades según el apetito de los comensales o si el plato cocinado se va a servir como único o va a llevar algún otro antes o después de

A menudo, la licenciada ha pasado tanto tiempo estudiando para poder sacar su carrera, que ha descuidado el aprendizaje de otras labores tan indispensables   como es la de la costura. Cuando la licenciada se encuentra, por ejemplo, con un bajo de pantalón demasiado largo y comprueba que entre sus herramientas de trabajo no cuenta con una máquina de coser, idea trucos que hacen más sencillo su trabajo marujil. Procede pues la maruja-licenciada a explicar dicho truco.  Consiste en fruncir el dobladillo original para que quede recogido en el tobillo. ÚTILES NECESARIOS Tijeras Goma Aguja e hilo Dedal Abreojales Imperdible Lo primero que debemos hacer es armarnos con este extraño artilugio llamado abreojales, ya que nos facilitará la tarea de descoser una pequeña parte del bajo original que traen de fábrica los pantalones (si no se tiene abreojales se puede hacer con unas tijeras de punta). No hace falta descoser demasidado, solo lo necesario